Innovando en el tratamiento de parásitos intestinales
Una colaboración internacional para implementar un nuevo medicamento dos en uno para la helmintiasis
El resultado de más de 5 años de investigación
La historia detrás de nuestro tratamiento para los parásitos intestinales.
El proyecto de investigación STOP2030 marca los pasos finales en nuestro viaje para crear un tratamiento alternativo y más efectivo para la helmintiasis transmitida por el suelo causada por parásitos intestinales. En áreas con saneamiento deficiente, los huevos de los parásitos son excretados en las heces y luego ingeridos por otra persona. La OMS estima que hay 1500 millones de personas infectadas. En los últimos años, se ha evaluado en ensayos clínicos en tres países una nueva formulación para tratar las infecciones helmínticas transmitidas por el suelo (STOP I Y II). Tras los resultados exitosos obtenidos, el siguiente objetivo de STOP2030 es completar su evaluación clínica y analizar su viabilidad y aceptabilidad, a fin de preparar su futura implementación.
Un enfoque dual e innovador
Reducir costes y aumentar la efectividad centrándose en cinco especies de parásitos intestinales
El enfoque consiste en un nuevo tratamiento que combina dos medicamentos existentes y con licencia que actualmente se utilizan para el tratamiento de los parásitos intestinales. Estos compuestos, por separado, tienen limitaciones ya que cada uno trata diferentes tipos de parásitos intestinales y existe el riesgo de generar resistencia a los medicamentos. La combinación de estos dos compuestos en una sola pastilla proporciona una terapia innovadora y efectiva contra las cinco especies y reduce el riesgo de que los parásitos desarrollen resistencia. La coformulación tiene como objetivo ser segura, accesible y asequible para facilitar su implementación en campañas masivas de administración de medicamentos.
Transformar la investigación en acción
Un esfuerzo global hacia la implementación
Para abordar de manera efectiva el problema causado por los parásitos intestinales, es esencial cocrear soluciones con los países afectados por la enfermedad. Por este motivo, el equipo está compuesto por socios de los sectores de investigación y salud pública de Kenia y Ghana, así como por organizaciones internacionales de salud pública y un grupo farmacéutico del sector privado. La colaboración entre continentes y áreas de experiencia ayuda a identificar y superar los desafíos que pueden limitar la implementación, acelerando la disponibilidad futura del tratamiento para todas las personas que lo necesitan.
